En este flashforward incluyo varias informaciones de interés que he recopilado durante los últimos días.
“Control remoto” en la docencia
Por orden de actualidad, la primera noticia corresponde a la Comunidad de Madrid que, a fecha de hoy, informa del funcionamiento del SICE (Sistema de Información de Centros Educativos), un servicio de información académica a través de medios telemáticos. Gracias a este servicio, los padres tienen conocimiento diario de los datos académicos concernientes a sus hijos, desde el horario de clases hasta las notas o las faltas de asistencia.
El SICE se implantó el mes de septiembre pasado y, hasta final de año, más del 70% de los institutos de la Comunidad lo han activado. Los institutos proporcionan a cada familia un acceso electrónico personalizado para garantizar la privacidad del alumno. Una vez activado, los padres pueden recibir la información mediante Internet –Portal Escolar–, por correo electrónico o mensaje de texto en su teléfono móvil.
La actualización de los datos se lleva a cabo a diario desde los propios institutos a través de dos sistemas. Uno de ellos es la Ayuda a la Función Docente con dispositivos PDA (AFD/PDA). Cada profesor dispone de una PDA donde introduce notas, faltas o incidencias. Esta información se sincroniza con el SICE. Posteriormente, se remiten los mensajes a los padres y se presenta la información en la web.
El otro sistema, más implantado, se denomina Ayuda a la Función Docente con acceso por Internet (AFDi). En este caso, cada profesor dispone de una clave para acceder a la web del Portal Escolar en la que introduce los datos de sus alumnos. La sincronización con el SICE se produce de forma inmediata en cuanto se graban los datos.
‘Minority Report’ no es Ciencia-Ficción
El CES (Consumer Electronic Show) de Las Vegas ha finalizado dejándonos con un pie, y parte del otro, en el futuro. Sirvan de ejemplo el avance en la televisión 3D, que ya se mencionó en un Flashforward anterior, así como otros dispositivos relacionados con el espectacular avance en estas tecnologías en tres dimensiones y el mundo virtual.
Por un lado, de la mano de una empresa israelí especializada en tecnología 3D, Prime Sense, con su Living Room Entertainment (algo así como Diversión Familiar), en un principio pensado para aspectos lúdicos, como indica su nombre y puede verse en el vídeo promocional. No obstante, podría extenderse al uso general de ordenadores y otros dispositivos asociados a pantallas, como podría ser el caso de una pizarra digital.
Por otro lado, Ligth Touch 0.1, de la británica Light Blue Optics, un gadget de bolsillo que permite crear un monitor táctil de 10 pulgadas sobre cualquier superficie consistente. Este invento utiliza una tecnología de proyección de láser holográfica, con un algoritmo que genera imágenes en 2D. Según algunos expertos que han probado el producto, su sensibilidad es muy precisa y recuerda al uso de un iPhone.
No son los únicos proyectos en esta área. De hecho, se viene investigando desde tiempo atrás con diferentes resultados, como se puede comprobar en algunos de estos otros productos y prototipos:
El interfaz gestual que Toshiba presentó hace un año también en CES; la interfaz de usuario de Oblong Industries, G-Speak, inspirada por la utilizada en la futurista pelicula Minority Report, dirigida por Spielberg en 2002; la alemana PointScreen, interfaz para manipular objetos digitales sin tocarlos; Interactive Wall (1 o 2); o algunos de los prototipos de Microsoft, como SecondLight o The Sphere.
Aun sin estar del todo pulidos y sin consenso, estamos ante el inicio de una nueva etapa en lo que se refiere a la interactividad entre el hombre y los dispositivos electrónicos.
Por último, y sin abandonar la feria de Nevada, mencionar el impresionante desarrollo de dispositivos portátiles –híbridos de laptop con lector de libro digital o con teléfono de última generación–, que han podido verse. Se trata de una nueva generación que consiste en aparatos de doble pantalla. En los más avanzados, como es el de MSI (puede verse hacia el minuto 1.50 en el vídeo de Rory Cellan-Jones, el corresponsal de tecnología de la BBC), donde antes había teclado ahora existe otra pantalla táctil. Algo así como un doble Tablet PC, en el que ambas pantallas pueden funcionar en conjunto o por separado, además de convertirse en teclado virtual.
La taiwanesa Asus, por su parte, ha presentado un portátil que puede ser desplegado para funcionar como un Tablet PC de una sola pantalla o como un televisor LED de 47 pulgadas. Además, están trabajando en pantallas de tecnología OLED (Organic Light Emitting Diodes) con el objetivo de hacerlas flexibles.
Por lo tanto, lo que nos parecía factible únicamente en las películas o gracias a efectos especiales, se va convirtiendo en realidad tangible y al alcance del público general. Ya sólo nos falta ver coches voladores. Pero, por si acaso, lo diré con la boca pequeña, porque visto lo visto…
Y ahora, ¿dónde guardarán el dónut?
Navegando me he encontrado con una interesante propuesta puesta en marcha en varios centros educativos y cuya tendencia está en alza.
La denominan Mochila digital y se trata de la utilización de memorias USB en las que los alumnos portan tanto aplicaciones como datos, a modo de metáfora de la mochila real. Resuelve varios problemas, como la instalación de software, puesto que pueden existir diferentes equipos en un colegio (PCs de sobremesa, PCs de aula, portátiles, tablet Pcs), así como la compatibilidad con los equipos que los alumnos tengan en casa. Además, sistematiza el trabajo organizado de los alumnos: cada uno tiene su propio pendrive, pero todos comparten una estructura común.
En el caso concreto del que extraje la información, optaron por la suite Portable Apps de Apple, adaptada a sus necesidades particulares. Se trata de un conjunto de aplicaciones portátiles que permiten trabajar de forma sencilla, ya que hablamos de alumnos de 3º de primaria (7-8 años).
Pero hay muchos otros centros que están adoptando la Mochila digital y es de suponer que cada uno lo ajuste según sus necesidades. La existencia de software libre o aplicaciones de código abierto permiten una sencilla adaptabilidad para cada circunstancia.
En mi opinión, si este tipo de propuestas continúan avanzando y convirtiéndose en la norma, en un futuro cercano las espaldas de los niños, los bosques y el bolsillo de los padres también apreciarán las ventajas.
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